
El cannabis es una planta de origen milenario, sin embargo durante mucho tiempo estuvo estigmatizada hasta que comenzaron a descubrir sus beneficios y emplearon en el ámbito medicinal, luego se extendió al plano de la estética, pero sus primeros pasos no fueron fáciles.
En 1998 la compañía The Body Shop lanzó una crema que entre sus ingredientes poseía cáñamo y su envase mostraba una hoja de marihuana, en ese momento causó un revuelo, a tal punto, que en Francia la policía hizo una redada en una de las tiendas de la conocida marca.
Hoy día las cosas han cambiado, afamadas firmas disponen de una línea a base de cáñamo, los productos se multiplican en sérums, hidratantes, champús, mascarillas, ampollas, bálsamos labiales y hasta en velas y perfumes, los cuales se encuentran en distintos establecimientos comerciales como perfumerías y tiendas de autoservicio.
Esto se debe a que se dejó de ver el cannabis como algo nocivo y se comenzó a comprender sus propiedades.
Te puede interesar: ¿Cremas con cannabis para rejuvencer la piel?
Las compañías han dejado claro que el cánnabis empleado en la cosmética es el cáñamo, una planta familia de la marihuana con la particularidad que su concentración de THC es igual o menor al 0,3%, por lo tanto su efecto de psicoactividad es prácticamente nulo.
Variedades
Del cáñamo la cosmética aprovecha el CBD, un cannbinoide no psicoactivo que tiene cualidades humectantes, antioxidantes y antiinflamatorias que son muy beneficiosas para la piel.
También hay cosméticos elaborados con el aceite de semilla de cáñamo, esta variedad no contiene los cannabinoides de la planta, pero sí ácidos grasos muy saludables como el omerga 3 y 6, los cuales ayudan a nutrir la piel.
Te puede interesar: Aprende a diferenciar los cosméticos con cannabis
Estos productos son muy favorables para aquellos cutis resecos y maltratados por la constante exposición al sol y a la contaminación, pues en esos casos la formulación tópica de origen natural se encarga de reparar la piel, mediante un proceso de humectación que permite combatir signos de envejecimiento e inflamación y darle a la piel un aspecto suave.
Esas características han despertado el interés en muchos, lo cual ha hecho que la industria crezca a pasos agigantados en las últimas dos décadas y se espera mantenga esa tendencia en los próximos años en un mercado interesado en el bienestar.