El CBD está en auge desde que comenzó a comprenderse los múltiples beneficios de la sustancia y las autoridades dejaran de ver la planta de cáñamo como un narcótico, a partir de ese momento, las ventas de CBD han proliferado y hoy día se consigue variedad de aceites en múltiples presentaciones.
Justamente para que el producto esté en los anaqueles comerciales de herbolarios y tiendas especializadas, el CBD pasa por un proceso que consta de varias fases.
Cultivos
Todo comienza en los cultivos de cáñamo industrial, los cuales son sembradíos destinados a la producción de aceite de CBD, por esa razón cada planta a utilizar debe tener un máximo de 0,3% de THC concentrado, si excede esa cantidad, entonces es considerado cáñamo caliente y no sirve para tal fin.
Aquellas plantaciones que cumplen con los requisitos califican para procesar aceite de CBD, el cual se obtiene mediante un proceso de extracción que puede ser con la ayuda de un solvente o también de manera manual mediante, presión o calor.
CBD según su estado
Cuando los aceites esenciales de la planta de cáñamo se extraen por primera vez, el producto resultante se considera extracto de cáñamo crudo, una composición oleosa lo más natural posible, aunque con varios trazos de tipo vegetal que pueden interferir en el olor, sabor y efecto del CBD.
Debido a que en su estado crudo el aceite contiene impurezas y otros agentes vegetales, existe una fase de destilación, este proceso tiene como único fin, desechar todas esas partículas que están demás en la composición oleosa. Para ello, se aplica una especie de filtrado en el cual se eliminan todos los compuestos no deseados, como cera y clorofila. De este modo, es posible conseguir una sustancia más pura.
Tras la destilación, se logra un aceite de CBD mucho más limpio, que además posee, otros cannabinoides y terpenos presentes en el cáñamo, por eso es considerado un aceite de amplio espectro o espectro completo, bajo esa composición es posible conseguir los efectos del CBD y adicional, los del CBC (Cannabicromeno), CBN (Cannabinol), CBG (Cannabigerol), entre otros.
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Aún hay una manera de conseguir el CBD más puro se trata del aislado (isolate) de CBD, un proceso de refinamiento mucho más riguroso que se aplica cuando se extraen los compuestos del cáñamo a temperatura ambiente, entonces se logra obtener los distintos cannabinoides en forma de cristales sólidos, en ese momento se purifica y se obtiene el CBD en pequeñas partículas incoloras e inodoras que se pueden consumir de manera directa o en alimentos y bebidas.
Ahora que ya conoces la composición del CBD según su estado, seguramente sabrás elegir el que más te convenga.
