Hay quienes consiguen buenos resultados al mezclar cannabis y sexo, algunos afirman que viven el encuentro sexual con mayor intensidad. Ante esa tesis, investigadores realizaron una revisión a varios estudios científicos sobre el tema.
En ese abordaje, sacaron a relucir un estudio del Centro médico de la Universidad de Stanford que bajo una encuesta preguntó a más de 28,000 mujeres y casi 23,000 hombres con qué frecuencia habían tenido relaciones sexuales en las cuatro semanas anteriores a la consulta y con qué frecuencia habían consumido marihuana en el último año.
Tras analizar las respuestas, los autores notaron que las mujeres no consumidoras informaron haber tenido relaciones sexuales seis veces en promedio durante las últimas cuatro semanas. En cambio, las mujeres que consumían marihuana diariamente tenían relaciones sexuales 7.1 veces en promedio, mientras que los hombres no consumidores dijeron que habían tenido relaciones sexuales un promedio de 5.6 veces en las cuatro semanas anteriores a la consulta, en comparación con los usuarios diarios de marihuana que informaron haber tenido relaciones sexuales un promedio de 6.9 veces.
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Otro estudio correspondiente a la Clínica de Cleveland determinó que los problemas con la función sexual afectan a un 43% de las mujeres y 31% de los hombres y sugirió que el cannabis puede ayudar a tratar problemas de rendimiento, tales como, baja de libido, resequedad vaginal, eyaculación precoz e incapacidad para alcanzar el orgasmo.
También nombraron un artículo revisado por PuMed, donde se reseña que el cannabis retrasa la eyaculación precoz, mejora las experiencias íntimas y potencia el rendimiento sexual.
Por último, destacaron una investigación publicada en Journal of Clinical Psychology en 1979, considerada una de las primeras investigaciones oficiales relacionadas con marihuana y funcionamiento sexual, en el cual se preguntó a 84 estudiantes de postgrado sobre su experiencia con la marihuana y el sexo. Los resultados arrojaron que la planta mejoraba el orgasmo.
Luego de citar los antecedentes antes mencionados, los autores de la revisión dejaron claro que se requieren mayores investigaciones que aporten suficientes evidencias científicas sobre el cannabis y su aporte en la sexualidad.
