Bienestar

Champú con CBD, un aliado en la salud capilar

Además de mejorar la estética del cabello, la sustancia combate algunas enfermedades capilares. Conoce más en esta nota

Dentro de la industria cosmética el CBD gana protagonismo y actualmente es posible conseguir una amplia línea de artículos para el cuidado personal, entre ellos, los champús a base de cáñamo. Muchas marcas comerciales los promocionan como un producto para mejorar la estética del cabello, pero más allá de ello, estas preparaciones sirven para tratar algunas enfermedades capilares, como la psoriasis, el eccema y la dermatitis seborreica.

Quienes padecen alguna de estas afecciones, pueden encontrar en el champú con CBD mejoría, preferiblemente cuando se opta por una formulación natural, libre de sulfatos, colorantes, parabenos, siliconas u otras sustancias de origen sintético que tienden a ser potencialmente dañinas.

Beneficios del champú con CBD

Con una preparación natural y con cannabidiol como ingrediente base es posible conseguir alivio a la psoriasis o eccemas, pues el CBD posee un potencial antiinflamatorio que, al aplicarse sobre el área capilar, ayuda a reducir la picazón, el ardor y el eritema que suelen desencadenar estas enfermedades.

El CBD también es rico en ácidos grasos naturales que actúan como un humectante regulador, capaz de hidratar zonas resecas y controlar la excesiva secreción de sebo, de esta manera puede combatir la seborrea.


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Además de estos beneficios en el ámbito de la salud, es necesario mencionar que por su composición, ayuda a nutrir y reparar el cabello, el cual se torna mucho más fuerte, brillante, sedoso y manejable.

Hay quienes tienen duda sobre cómo aplicar el champú con CBD y es necesario aclarar que se utiliza como cualquier otra solución de aseo capilar, es decir, se humedece el cabello, luego se aplica una cantidad considerable, mientras se frota con la yema de los dedos para que salga abundante espuma, se deja actuar entre 5 a 10 minutos y luego se enjuaga, un procedimiento que se recomienda dos o tres veces a la semana durante el baño convencional.

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