Los cultivos de cáñamo son legales en España, siempre y cuando cumplan con una serie de requisitos legales, así que si usted está interesado en incursionar en esta actividad, entonces debe tener en cuenta varios aspectos.
Lo primero es saber que el cultivo de cáñamo industrial también conocido como hemp, solamente puede destinarse a la obtención de fibra, grano y semilla, solo en esos casos será autorizado utilizando un tipo de semillas certificadas que no posean más del 0.2% de THC y estén debidamente inscritas en el correspondiente Registro de Explotación Agraria.
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En el caso de que el cultivo sea para la obtención de granos y semillas, el agricultor debe contar con un registro de productor de semillas y plantas de vivero en la categoría que corresponda.
No se pueden procesar los cogollos
Importante tener en cuenta que los cogollos de la planta son considerados como estupefacientes, e incluso, cuando su concentraciones de THC sean mínimas, por lo tanto, no se pueden procesar ni siquiera para la obtención de cannabidiol (CBD) al menos que cuente con una autorización de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
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En conclusión, bajo la normativa española es posible utilizar casi toda la planta del cáñamo, es decir, tallos y hojas, menos los cogollos, los cuales tienen que ser completamente destruidos por considerarse psicotrópico.
