
Aunque el cáñamo es legal a nivel federal en los Estados Unidos, todavía es visto con algo de recelo por las fuerzas armadas del país, debido a que los trazos de THC pueden hacer dar positivo en un test antidoping, pero el criterio es otro cuando se trata del uso de la fibra de cáñamo para textiles, de hecho, hay un interés de emplearlo en los uniformes de los francotiradores.
Y es que en una solicitud de información (RFI) publicada la semana pasada, el Ejército anunció que está interesado en explorar materiales alternativos para mejorar los uniformes que usan los francotiradores y que, a su vez, permitan camuflajearse de los enemigos, bajo ese objetivo, entre las propuestas figura el cáñamo y el yute.
Buscan mejores uniformes
“El interés está específicamente en un hilo/cordel/hilo utilizado para romper el contorno de los francotiradores hecho de yute, cáñamo o fibra natural similar”, escribieron en el comunicado para referirse a la ropa operativa e individual para el Sistema Ghillie mejorado (IGS).
Vale destacar que el IGS es un nuevo y mejorado sistema de ocultación de francotiradores desarrollado para satisfacer las necesidades de ocultación de la comunidad de francotiradores, por lo tanto, proponen que el IGS tengan materiales de camuflaje modificables que puedan usarse para cambiar la apariencia del francotirador y precisamente el yute, el cáñamo u otra fibra natural de IGS ayudarán a ocultar al Sniper y al Scout durante las misiones, permitiéndoles pasar desapercibidos en las proximidades de las fuerzas enemigas.
Te puede interesar: Conoce el proceso de obtención de la fibra de cáñamo
“El material no presentará un peligro para la salud del soldado y debe mostrar compatibilidad con el contacto directo y prolongado con la piel”, dice el anuncio. Además, el material no puede “agregar una cantidad significativa de peso” a los uniformes. Importante tener en cuenta que las respuestas a la RFI deben presentarse antes del 27 de julio.