Falta poco para que los médicos que laboran en hospitales de California suministren marihuana a los pacientes con afecciones graves, esto como parte de la Ley de Acceso Compasivo al Cannabis Médico o Ley Ryan que contó con la aprobación de la Asamblea y el Senado Estatal.
Una vez, el gobernador estampe su firma en el proyecto de Ley, se comenzaría a ejecutar, a tal efecto, aquellos pacientes con enfermedades terminales recluidos en los centros asistenciales podrían recibir cannabis, siempre y cuando no sea fumable.
Como tal, la ley contempla el uso de cannabis en preparaciones que se pueden ingerir o aplicar de manera tópica y mantiene la prohibición de fumar o vapear componentes de la planta, también restringe su uso de cualquier forma en las salas de emergencia.
Respaldo de los legisladores
Una disposición legal que la Asamblea de California vio con buenos ojos, al punto de contar con 57 votos a favor y solo uno en contra, en las votaciones realizadas el pasado 9 de septiembre, la tendencia fue similar al día siguiente en el Senado, pues en esa instancia obtuvo 36 votos a favor y uno en contra.
“El proyecto de ley requeriría tipos específicos de instalaciones de atención médica para permitir el uso de cannabis medicinal por parte de un paciente con una enfermedad terminal dentro de la instalación de atención médica, sujeto a ciertas restricciones», se lee en el documento, donde además se adiciona: “El proyecto de ley requeriría que un paciente le proporcione al centro de atención médica una copia de su tarjeta de marihuana medicinal o documentación escrita de que un médico recomienda el uso de cannabis medicinal. El proyecto de ley requeriría que un centro de atención médica restrinja razonablemente la manera en que un paciente almacena y usa cannabis, con el fin de garantizar la seguridad de otros pacientes, invitados y empleados del centro de atención médica, el cumplimiento de otras leyes estatales y las operaciones seguras. del centro de salud «.
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La votación demostró que prácticamente la totalidad de los legisladores está de acuerdo con la propuesta legal, aunque la iniciativa en sí, fue del senador estatal, Ben Hueso, quien a lo largo de su carrera ha mantenido una lucha para lograr se permita el uso de cannabis en instalaciones médicas y de este modo atender a los pacientes en fase terminal.
Parte del interés de Hueso se debe a una experiencia de un padre cuyo hijo murió de cáncer e inicialmente se le negó el acceso al cannabis en un hospital de California hasta que encontró una instalación que hizo la excepción y le permitió usar componentes de la planta para mejorar la calidad de vida del paciente.
