Las autoridades de la ciudad de Nueva Orleans, Luisiana, decidieron poner fin a las sanciones legales relacionadas con posesión de marihuana y en efecto, indultan a unas 10,000 personas procesadas o condenadas por tales cargos.
La medida es posible luego que el Ayuntamiento diera el visto bueno a la Ordenanza 33,328, pues si bien, los legisladores locales no tienen potestad para legalizar el cannabis, sí tienen competencia para despenalizar la sustancia mediante un cambio de política policial, bajo esa atribución, decidieron aprobar la normativa local.
Objetivo de la despenalización del cannabis
Los promotores alegaron que el objetivo es ganar la confianza de la comunidad con la policía, y permitir que estos uniformados se concentren en reducir los delitos violentos en lugar de perder el tiempo con cargos menores relacionados con marihuana.
A tal efecto, fumar cannabis se mantiene prohibido en espacios públicos y en caso que alguien sea sorprendido por una autoridad policial, recibirá una infracción en lugar de una citación por droga.
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“Estas nuevas políticas ayudarán al Departamento de Policía de Nueva Orleans a generar confianza en la comunidad y utilizar las horas de mano de obra ahorradas para abordar problemas importantes como tiroteos, asesinatos y la prevención general de la violencia en nuestra ciudad”, comentó la presidenta del Concejo, Helena Moreno. “Debemos comenzar a repensar las prácticas históricas que han encarcelado, multado y estigmatizado a nuestras comunidades durante décadas. Ha llegado el momento de poner fin a la criminalización de la posesión de cannabis. Estoy orgullosa de lo que este Concejo Municipal ha logrado hoy. Esto es histórico «, acotó.
