Europa todavía se considera un territorio conservador en cuanto al criterio sobre el cannabis, aunque analistas estiman que este año hayan cambios importantes y la postura comienza a ser menos rígida, de hecho, Malta dio el primer paso, Luxemburgo sigue atrás, Suiza está por arrancar un programa experimental y Alemania trabaja en cuanto a la legalización del cannabis.
Mientras tanto, el uso de la marihuana se maneja bajo la clandestinidad en gran parte del territorio europeo y eso conlleva a imponer sanciones a quienes sorprenden en flagrancia. Ahora bien, un nuevo informe del Observatorio Europeo de las Drogas revela que España es el país del viejo continente que más impone este tipo de medidas sancionatorias, en particular 43% se aplican en territorio ibérico.
El documento subraya que España ocupa el tercer lugar en consumo de cannabis en Europa y el primero en cuanto a sanciones por hechos relacionados con el consumo de esta sustancia.
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El informe recopila datos de 2020 suministrados por cada país y específica que en España se practicaron 258,379 intervenciones por uso o tenencia de cannabis, 69,926 más que en Alemania, el cual es el segundo país donde más se castigó este consumo, cinco veces más que en Turquía y casi ocho más que en Bélgica, tercero y cuarto, respectivamente, en el escalafón.
Con tales datos se concluye que de cada diez sanciones que ese año se impusieron en Europa por uso de cannabis, cuatro se instruyeron en España, es decir, una cantidad muy cercana a la mitad de las 600,802 que se registraron en los 17 países del entorno europeo que proporcionaron datos al Observatorio de las Drogas.
